En octubre del año pasado en la UNCUYO me encontré con Lucas Tolosa, ex compañero del secundario al que le había perdido el rastro. Justo ese mismo dia terminaba de rendir el Pre de Ing. en alimentos. Me contaba entre otras cosas que estaba muy bien, que después de mucho tiempo y varios intentos había logrado terminar el secundario en la nocturna de la Corvalán, ahí en la escuela del barrio, en esa que alguna vez fuimos compañeros.
Estaba re contento porque la mamá había terminado un curso de gastronomía que daban en la Muni, y que a él le estaban por dar el carnet de Manipulación de Alimentos asique estaba gestionando un permiso para abrirse un carrito en Los Sauces y Ballofet, al lado de la Shell, “igualito al que tenés vos”, me dijo. Me contaba que les habían entregado una cocina industrial del Programa “Banco de Herramientas, Maquinarias y Materiales” que el año pasado el Municipio promovió conjuntamente con Desarrollo Social de la Nación, y que con eso estaban haciendo Bollitos y galletas para los Hoteles de los Jubilados que venían de paseo con el PAMI. Eso para el desayuno, y que al mediodía seguían con la canasta de empanadas en la Plaza 9 de Julio, que le compraban mucho los del Banco Nación y Anses, que están enfrente. Y estaba bien, mucho mejor.
Ayer a la mañana estaba en La Yunta de Siria y Santa Fe haciendo unas compras para abrir “Lamacchina.sr”, y Luca entró con un azadón y un rastrillo. Me saludó como quien no quiere la cosa y mientras yo pagaba alcancé a oír que le decía al encargado que le limpiaba la acequia a cambio de una leche y unos pañales.
Mientras él barría encendí un PIER y le daba una manito.
Me contó que los del Banco andaban de paro porque habían echado a un montón, y que Pami ya no saca más los micros de turismo, asique andaba flojo el laburo, por lo que se puso a limpiar acequias para poder comprarle los útiles y el guardapolvo a los nenes. Me mostró una mochila de Violeta que le acababa de dar una vecina para que le barra la vereda. Encima me contó que a su vieja le había vuelto a agarrar la artritis porque ya no le daban los medicamentos asique tampoco podía seguir trabajando con la cocina pero que estaba bien, hasta que le pregunté qué onda la facu, y me dijo:
“Naaa amigo, estaba flashando, mirá si yo voy a poder estudiar”.
Cuando me iba para casa pensaba en Luca, y en como hoy el presidente nos dice que el Estado es el “pedófilo en el jardín de infante” – ¡que locura pensar así! – y en cómo cambio el proyecto de vida de Luca. Hoy nos propone el sálvense quien pueda, lamentablemente no creo que Luca se pueda salvar, más si les sacaron todas las herramientas.