En una medida que parece ignorar el crudo invierno que se avecina, el Gobierno nacional estaría pensando en eliminar el régimen de zonas frías en Mendoza, el cual permitía a los usuarios acceder a descuentos en la tarifa de gas de entre 30% y 50%. Este cambio llega justo en el invierno más frío de los últimos 10 años, lo que agrava aún más la situación para los mendocinos.
A partir de junio, el sistema de subsidios se verá profundamente modificado. El llamado “periodo de transición”, que según el decreto oficial se extenderá desde el 1 de junio de 2024 hasta el 30 de noviembre de 2024, podrá ser prorrogado una sola vez por un máximo de seis meses. Este decreto lleva las firmas del presidente Javier Milei y del ministro de Economía, Luis Caputo.
El Gobierno argumenta que busca incentivar las inversiones de las empresas y ajustar las tarifas para que reflejen el costo real del suministro. Sin embargo, detrás de este discurso de eficiencia y racionalización se oculta una cruda realidad: la eliminación de subsidios afecta desproporcionadamente a quienes más lo necesitan. “Las políticas de subsidios se mantuvieron disociadas de la capacidad de pago de los usuarios”, reza el decreto, justificando así un recorte que golpeará directamente a los bolsillos de los ciudadanos.
El decreto critica lo que llama “deficiencias” en el sistema actual de subsidios, destacando la coexistencia de tres regímenes: la Tarifa Social, la segmentación tarifaria por ingresos y la Ley de Zonas Frías, de la cual Mendoza es beneficiaria desde 2021. Esta diversidad de subsidios es presentada como una complicación burocrática más que como un apoyo esencial para las familias vulnerables.
Con la reestructuración, se pretende trasladar a los usuarios los costos reales de la energía, promover la eficiencia energética y garantizar que los hogares vulnerables puedan acceder al consumo indispensable de energía. Sin embargo, esta “garantía” parece insuficiente frente a la eliminación de los descuentos que tantos mendocinos necesitan para calefaccionar sus hogares en un invierno excepcionalmente frío.
Además, la Secretaría de Energía tendrá la potestad de establecer nuevos topes de consumo subsidiados y modificar los criterios de segmentación, lo que añade más incertidumbre sobre cómo se implementarán estas medidas y cuál será el verdadero impacto en las facturas.
Mendoza, que solo desde 2021 formaba parte de las Zonas Frías, verá duplicarse los costos de las facturas de gas si se elimina el régimen. Esta decisión, tomada en un contexto de severas condiciones climáticas, revela una falta de sensibilidad y previsión por parte del Gobierno, dejando a miles de familias mendocinas en una situación aún más precaria.